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El tramo carretero Chihuahua-Juárez ha sido nuevamente señalado como escenario de presuntos actos de corrupción por parte de elementos de la Policía Federal Ministerial adscritos a la Fiscalía General de la República. Este fin de semana, automovilistas denunciaron un retén sospechoso cerca del kilómetro 90, junto a la gasolinera El Navegante, donde conductores eran interceptados y extorsionados con cobros indebidos de entre 20 y 100 dólares.
Los retenes, compuestos por vehículos oficiales y particulares atravesados en ambos sentidos, justificaban las detenciones con argumentos ambiguos, alegando presuntos “excesos” en mercancías o irregularidades en vehículos con permisos federales. Testigos señalaron la participación de vehículos sin identificación, autos particulares y civiles sin armas visibles.
La Fiscalía General de la República, como en otras ocasiones, no reconoce oficialmente estas operaciones, pero tampoco las investiga.
Estos operativos no oficiales, que se han reportado anteriormente en otros puntos de la región, generan temor entre los automovilistas, quienes denuncian la falta de intervención por parte de las autoridades y la persistencia de la corrupción en esta vía clave.
