Ciudad Juárez, 10 de agosto de 2025.— Una noche marcada por el temor y la indignación: el crematorio “Plenitud”, ya envuelto en uno de los escándalos más tenebrosos de la región, fue nuevamente objeto de conmoción tras el hallazgo de huesos dispersos entre escombros y basura, durante una movilización organizada por el colectivo Justicia Para Nuestros Deudos .
Escena macabra
En la movilización frente a las instalaciones del crematorio, miembros del colectivo descubrieron restos óseos mezclados con desechos. La Policía Municipal intervino de inmediato y acordonó la zona, mientras agentes de la Fiscalía recogían los restos para trasladarlos al SEMEFO, donde aún se desconoce si corresponden a seres humanos o animales.
Un crematorio ya condenado por su horror
La sombra del espanto que envuelve a Plenitud no es nueva. Desde el pasado junio, la Fiscalía de Chihuahua sorprendió al mundo al descubrir 383 cadáveres almacenados en avanzado estado de descomposición, nunca incinerados como se suponía. Investigaciones posteriores elevaron el número a 386 cuerpos.
Las familias afectadas denunciaron haber recibido urnas con restos falsos: tierra, piedras, arena o incluso balastros en lugar de cenizas humanas. Entre los detenidos ya vinculados a proceso se encuentran dos operadores del crematorio, acusados de inhumación clandestina y tratamiento indebido de cadáveres.
Investigación lenta, dolor interminable
A más de un mes del macabro descubrimiento, el avance de la identificación es frustrantemente lento: solo se han identificado plenamente a 33 cuerpos, de los cuales 14 han sido entregados a sus familias. Las denuncias no cesan: actas de defunción duplicadas, discrepancias oficiales y falta de peritaje independiente son solo la punta del iceberg.
¿Una tragedia sin fin? El nuevo hallazgo de huesos entre residuos en el crematorio, justo cuando aún no se ha cerrado el capítulo por los cuerpos enterrados en vida, encendió de nuevo la llama del escándalo. ¿Será Plenitud sinónimo de horror eterno? ¿Cuántas familias más recibirán urnas con lo que no son cenizas? ¿Podrán las autoridades brindar alguna justicia real?
