
En un giro alarmante de los acontecimientos, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha convocado de urgencia a los principales líderes europeos a una cumbre en París para abordar la situación en Ucrania. Esta decisión surge tras las controvertidas acciones del presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha iniciado negociaciones de paz con Rusia, excluyendo deliberadamente a las naciones europeas del proceso.
La cumbre, programada para este lunes, reunirá a figuras clave como el canciller alemán Olaf Scholz, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el primer ministro polaco Donald Tusk y el primer ministro británico Keir Starmer. El objetivo es definir una estrategia conjunta que contrarreste las decisiones unilaterales de Trump y garantice que los intereses europeos sean considerados en cualquier acuerdo relacionado con el conflicto ucraniano.
El descontento en Europa es palpable. Líderes como Macron han expresado su preocupación por la exclusión de Europa en las conversaciones de paz, enfatizando la necesidad de una defensa autónoma europea dentro del marco de la OTAN. Mientras tanto, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha propuesto la creación de un “Ejército Europeo” para fortalecer la defensa del continente y reducir la dependencia de Estados Unidos.
La situación se agrava con las declaraciones del enviado especial de Trump para Ucrania y Rusia, Keith Kellogg, quien insinuó que Europa podría no tener un lugar en la mesa de negociaciones de paz. Esta postura ha sido recibida con indignación por parte de los líderes europeos, quienes insisten en la importancia de su participación en cualquier diálogo que afecte la seguridad del continente.

