
Mientras la atención nacional se centraba en la imposición de aranceles del 25% por parte de Estados Unidos a las exportaciones mexicanas, la Cámara de Diputados aprobó una reforma significativa a la Ley del Infonavit. Con 322 votos a favor y 107 en contra, se autorizó al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) a adquirir terrenos y construir viviendas de interés social a través de una empresa filial.
Esta reforma, impulsada por Morena y sus aliados, ha generado controversia. Los partidos de oposición, como el PAN, PRI y MC, argumentan que la creación de una empresa filial podría carecer de mecanismos adecuados de transparencia y rendición de cuentas. Además, expresaron preocupación por posibles desalojos de trabajadores sin el debido proceso judicial.
En paralelo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó órdenes ejecutivas que imponen aranceles del 25% a productos importados de México y Canadá, y del 10% a los provenientes de China. Esta medida, justificada por la administración estadounidense como una respuesta al tráfico de drogas y la inmigración ilegal, ha generado tensiones comerciales y podría tener repercusiones significativas en la economía mexicana.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó categóricamente las acusaciones de colusión con el narcotráfico y calificó las acciones de Trump como injerencistas. Sheinbaum enfatizó que la soberanía de México no está en negociación y ofreció una mesa de diálogo sin confrontación ni subordinación.