
CRONOLOGÍA DE UN ESCÁNDALO
- 2020–2023: Familias contratan funerarias para servicios de cremación en Ciudad Juárez. Sus difuntos, tras ser embalsamados, son enviados al crematorio “Plenitud” en Granjas Polo Gamboa ﹙al menos 383 cuerpos en total, incluyendo 2 recién nacidos y cuatro menores﹚.
- 27 junio 2025, 23:00 h: Denuncias por olores fétidos y olores de descomposición alertan a vecinos; policías hallan 60 cuerpos iniciales, dos dentro de una carroza fúnebre.
- 29–30 junio 2025: La Fiscalía asegura el inmueble y descubre la cifra total: 383 cuerpos apilados en condiciones degradantes, muchos desde 2020; se confirma la presencia de 2 bebés.
- 30 junio–1 julio 2025: Arresto de José Luis Arellano Cuarón (dueño) y Facundo Martínez Robledo (empleado). Se imputan por inhumación indebida, violación a la Ley General de Salud y presunto fraude por entregar cenizas falsas.
- 1 julio 2025: Fiscalía revela 15 cuerpos identificados oficialmente hasta el momento; peritos forenses reubican los restos para el análisis exhaustivo que podría durar semanas o meses.
ANÁLISIS JURÍDICO Y LEGAL: RESPONSABILIDAD LEGAL Y POSIBLES SANCIONES
Dueño y empleado:
- Inhumación indebida y fraude: 2–3 años.
- Violación a la Ley de Salud: 6–16 años.
- Hasta 19 años de cárcel.
Funerarias subcontratantes (LUZ Divina y amor eterno):
- Posible complicidad al efectuar pagos y no verificar el servicio.
- Sanciones penales por fraude y violaciones a derechos del consumidor y a civiles por daño moral.
COFEPRIS/COESPRIS:
- Supervisión ineficiente: no inspeccionaban desde 2022, pese a permisos vigentes.
- Puede enfrentar omisiones administrativas y revocación de permisos, sanciones disciplinarias.
Fiscalía de Chihuahua:
- Actuación tardía: ahora indaga, pero pudo haber evitado la crisis.
- Riesgo de perder credibilidad; debe asegurar transparencia y justicia efectiva.
DERECHO HUMANISTA Y CONSECUENCIAS ÉTICAS
- Violación a la dignidad del ser humano: Cuerpos tratados como mercancía, sin condiciones mínimas ni refrigeración, con maltrato institucional.
- Revictimización de las familias: Han recibido cenizas falsas; desconcierto y trauma ante la falsedad del destino final de sus seres fallecidos.
- Crisis forense: Sistema saturado; ADN dificultoso por sustancias de embalsamamiento; difícil restitución de cuerpos y cierre emocional para dolientes.
¿QUÉ HORIZONTES LEGALES SE VIENEN?
- Juicio penal inminente contra los acusados por los delitos mencionados.
- Investigación paralela por posibles responsabilidades de jugadores institucionales (funerarias, COESPRIS).
- Posibles demandas colectivas de familias afectadas por fraude y daño moral, con indemnizaciones.
- Reformas urgentes: endurecer controles sanitarios, supervisión periódica y trazabilidad efectiva de cremaciones.
EL FUEGO DE LA INDIGNACIÓN
“Los cuerpos estaban apilados como costales, pudriéndose en un crematorio con permisos, pero sin corazón ni refrigeración”.
Fiscal Jáuregui lo definió como “atroz” y “negligencia criminal”.
“Es violencia institucional cruda: muertes naturales convertidas en un crimen contra los muertos”.
Este no fue un simple descuido logístico: fue una trama perversa de fraude, negligencia, encubrimiento y violación a la dignidad. 383 cuerpos, entre ellos dos recién nacidos, fueron condenados al olvido, mientras autoridades y funerarias jugaban al mártir sin incinerar. Ahora, familiares, justicia y sociedad exigen más que explicaciones: piden verdad, reparación y castigo ejemplar.




