
El Paso, Texas.— María del Rosario Navarro Sánchez, conocida como “Chayo”, fue acusada en Estados Unidos de brindar apoyo material a una organización terrorista extranjera, convirtiéndose en la primera mexicana en enfrentar un cargo de esta naturaleza por colaborar con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La mujer de 39 años fue detenida en México el pasado 4 de mayo y entregada a las autoridades estadounidenses como parte de una operación binacional. Según la acusación formal, “Chayo” habría participado en actividades como el suministro de granadas al CJNG, además de estar involucrada en tráfico de personas, armas, drogas y dinero en efectivo. También usaba el alias “Fernanda”.
El caso se ventila en El Paso, Texas, una de las zonas fronterizas más afectadas por el trasiego de armas, drogas y dinero vinculado al CJNG, y donde operan agencias clave como la DEA y el FBI. La acusación se da tras la designación del CJNG como Organización Terrorista Extranjera (OTE) por parte del gobierno estadounidense en febrero de 2025, lo que permite procesar a colaboradores como si apoyaran a un grupo extremista.
Junto con “Chayo” fueron acusados Luis Carlos Dávalos López y Gustavo Castro Medina, también mexicanos, aunque ninguno de ellos enfrenta el cargo más grave: proporcionar apoyo material a una organización terrorista. La Fiscalía del Distrito Oeste de Texas señaló que este proceso es parte de la iniciativa “Recuperemos América”, enfocada en erradicar redes criminales transnacionales.
La acusación contra Navarro Sánchez no solo podría derivar en una condena de hasta cadena perpetua, sino que también sienta un precedente legal que transforma el enfoque con el que Estados Unidos combate a los cárteles mexicanos: ya no solo como delincuencia organizada, sino como amenaza terrorista global.