
La crisis en los penales del estado será enfrentada con medidas drásticas. Se implementará un Nuevo Modelo Penitenciario que busca erradicar la corrupción, frenar el ingreso de mercancía ilegal y mejorar la seguridad dentro de los centros de reclusión.
El plan incluye la instalación de “aduanas inteligentes”, inhibidores de señal para celulares y mejores salarios para el personal penitenciario. También se reforzarán los programas de reinserción social con prevención de adicciones y oportunidades laborales.
Las autoridades aseguran que estas estrategias blindarán los penales y evitarán que sigan operando como centros del crimen.

